Presidente del CMD advierte sobre ‘haitianización’ en hospitales, pero defiende atención a extranjeros
SANTO DOMINGO.- El presidente del Colegio Médico Dominicano, Waldo Ariel Suero, consideró que los hospitales públicos se están “haitianizando”, pero dejó claro que el gremio jamás plantearía que se le niegue atención médica a ninguna persona ya que ello iría en contra del juramento hipocrático.
Manifestó que los gobiernos han sido los responsables de esa situación por fallar en el control migratorio y protección de la frontera.
“Los responsables de esta situación son los gobiernos, que han fallado en imponer controles fronterizos adecuados,” afirmó Suero, destacando que esta problemática está afectando la capacidad del sistema sanitario para atender a la población dominicana.
Con relación a la violencia de la que han sido víctimas empleados de hospitales, señaló que aunque ha habido casos de haitianos como victimarios, la mayoría de los casos han sido dominicanos.
“Es natural que así sea, porque hay una proporción poblacional”, sentenció el galeno.
Según un informe del Ministerio de Salud Pública, más del 30 % de los partos atendidos en hospitales públicos corresponden a mujeres haitianas. En algunas regiones fronterizas, como Dajabón y Elías Piña, esta cifra puede superar el 50 %.
El caso más emblemático es el del Hospital Universitario Doctor José María Cabral y Báez, en Santiago, donde la demanda de servicios de ciudadanos haitianos ha crecido exponencialmente. En 2023, el hospital reportó que más del 25 % de sus recursos fueron destinados a atender pacientes extranjeros, la mayoría haitianos.
Además, el Estado dominicano invierte cerca de RD$5,000 millones anuales en la atención de haitianos en hospitales públicos. Esta cifra incluye no solo partos, sino también servicios de emergencia, consultas externas y tratamientos especializados.
La creciente demanda de atención médica por parte de haitianos ha generado conflictos tanto dentro como fuera de los hospitales. Por un lado, los dominicanos se quejan de que los servicios se ven desbordados, lo que provoca largas esperas y limitaciones en el acceso a tratamientos. Por otro lado, los médicos enfrentan una sobrecarga laboral y denuncian la falta de recursos para atender a todos los pacientes.
En regiones fronterizas como Pedernales y Montecristi, la presión sobre los hospitales es especialmente aguda. La falta de hospitales adecuados en Haití obliga a miles de ciudadanos de ese país a cruzar la frontera en busca de atención médica, incrementando la carga sobre las ya limitadas instalaciones dominicanas.